MARKETING ENGAÑOSO. LA MENTIRA EN LA PUBLICIDAD
Resumen
Existe una opinión generalizada de que los conceptos de “ética” y “empresa" son difíciles de asociar. Y esto se observa más claramente si los términos que se vinculan son “ética” y “marketing”. Esta disociación se justifica si consideramos que el marketing ha demostrado una enorme capacidad para obtener casi cualquier cosa que contribuya a los propósitos de una empresa, y que, mediante distintas técnicas (alguna de ellas cuestionadas) ha logrado alcanzar niveles de consumo excepcionales, extendiendo el uso de productos y servicios mucho más lejos que las necesidades razonables del ser humano.
Podemos decir que el marketing no recurre a prácticas éticas cuando emplea movilizadores de la conducta como el sexo o la muerte, o utiliza mensajes publicitarios que inducen a la lujuria, la envidia o la vanidad, en muchas ocasiones apelando a ilusiones, a sueños, al sentido de pertenencia, o simplemente utilizando la mentira. Así, el marketing (y la publicidad en particular) parecen no encontrar límites al momento de orientar a las personas para que consuman.
En este artículo pretendemos estudiar cómo se vinculan la ética y el marketing dentro de la empresa, y para ello analizamos los trucos o trampas usualmente utilizados en las comunicaciones de marketing, focalizándonos en la mentira en la publicidad.